lunes, 21 de mayo de 2007

NAGANO

17 de mayo.

Esta mañana ha amanecido lloviendo, tras despedirme del dueño del ryokan, abandono las instalaciones par buscar un lugar donde almorzar. De camino encuentro por tercera vez a la persona que me ayudó al llegar al pueblo. Tuve que declinar la oferta a desayunar en su casa, pues en 30 min. tomaba un tren junto a Lise hacia Nagano. Un abrazo muy grande para una bellísima persona.
Ya en Nagano me despido de Lise. Consulto mi guía de viaje y escojo Zenko-ji para hacer una visita antes de partir de regreso a Tokio. Es un templo muy importante, alberga la imagen de Ikkô-Sanzon, la primera imagen budista que se trasladó de Corea a Japón el año 552. La imagen original no se puede visitar, ni siquiera 37 generaciones de emperadores la han visto, solo cabe la posibilidad de ver una copia cada 7 años. Aun así la visita al templo y sus alrededores vale la pena.



A medio día tengo que dejar Nagano para subir a un autobús hacia Tokyo, creo que dedicaré otro día a visitar esta tranquila ciudad rodeada de montañas, pero eso será en otro de mis viajes.
De camino a Tokyo para los fans de la repostería compro otros dulces, estos estan rellenos de pasta de judía y nuez.


JIGOKUDANI ONSEN:

16 de Mayo.
Lise Gauthier es una apasionada de los monos, hace dos días que esta en Yudanaca observándolos, es Canadiense y se alberga en el mismo ryokan, la he conocido esta mañana y hoy hemos pasado el día en Jigikudani Onsen, observando y fotografiando monos. Por la mañana, he tomado un desayuno tradicional compuesto por muchos platillos, sopa miso, verduras variadas, algas, pescados preparados de varias formas, tortilla japonesa, arroz al estilo gohan acompañado del típico té. Este desayuno no es apto para todo el mundo, muchos ingredientes no serán apreciados para los paladares menos entrenados. Para un servidor resulto ser delicioso y abundante, suficiente para aguantar muchas horas de actividad.




Todo el día fotografiando monos, solo hemos parado para comer y charlar. Ha sido una jornada muy entretenida y en algunos momentos graciosa, pues os podéis imaginar como son los monos y sus actividades. El entorno, es un onsen (baño termal) situado a la vera de un río de montaña. En invierno se convierte en una bonita estampa, pues todo alrededor del onsen está nevado.


De regreso al ryokan hemos parado para comprar unos dulces en una pastelería para seguir informando a los seguidores de la repostería japonesa en España.


Por la noche hemos asistido a una exhibición de tiro con arco tradicional, el dueño del ryokan, es sensei (profesor) de una escuela. Allí pude obserbar el protocolo que se desarrolla antes de los disparos, experiencia muy interesante, donde la forma es tan o más importante como el resultado.
Al acabar, hemos salido a cenar a un restaurante tradicional, para degustar una exquisita tempura de hierbas de montaña con gamba acompañadas con varios platillos. Un plato típico de la montaña, difícil de encontrar fuera de este entorno por el módico precio de 6€. En la foto, mi amiga Lise Gauthier, con la que pase un agradable día junto a los macacos. -Un abrazo muy grande.