Hoy Ha sigo un gran día. Hemos practicado enduro en la cordillera andina, algunos en Barcelona seguro que se estarán muriendo de la envidia y puedo asegurar que no es para menos. hemos estado todo el día conduciendo unas KTM enduro 690. Eramos cuatro, Daniele, Astid, Klaus y un servidor. Os puedo decir que he acabado rendido de cansancio, ya que por la mañana he estado superando el periodo de adaptación a una nueva moto y un nuevo deporte. Eramos tres pilotos y una pasajera, los otros dos tenían experiencia, sin embargo yo he tenido que aprender. Me ha costado todo el trayecto de subida, en el cual me tenían que ir esperando, pero para la bajada, tras muchas horas en la moto, ya no me dejaban atrás sino que disfrutabamos haciéndonos pasadas. No me podía imaginar que en un solo día iría tan rápido, la verdad que a esta moto es muy fácil cogerle el tranquillo.
Hemos subido hasta casi los 5000m de altura, pasando entre lagos y montañas, con tramos técnicos y otros más rápidos. Tierra, piedras, barro, agua y nieve, he aprendido ha capear de todo. No os podéis imaginar lo que hemos disfrutado, solo decir que durante algunos tramos, la sonrisa me llegaba de oreja a oreja y otros solo quedaba que gritar al viento de la emoción. Me he olvidado de todo lo demás.
Al empezar, en la aduana Chilena
La última foto es otra ez en la aduana, con una cara que lo dice todo.
Por la noche, para culminar un grandisimo día, Barbacoa y Fiesta hasta la mañana siguiente. A pesar del dolor de todo mi cuerpo, he aguantado hasta la última cerveza.
Por cierto, ir buscando alguien que venda una KTM de enduro para mi regreso. :-)
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